domingo, 27 de diciembre de 2009

SUS PREGUNTAS RESPONDIDAS

Capítulo 15:
IMPULSO SEXUAL VERSUS MEDITACIÓN

Miyazawa: Durante la práctica de mi meditación, un fuerte deseo, lujuria en especial, aparece en mi mente, así que no puedo continuar meditando.
SWAMIJI: Es la misma cosa que le estaba diciendo a esta dama en la asamblea. ¿Cuál es tu deseo?
Miyazawa: Lujuria
SWAMIJI: ¿Tuviste padre, madre y todo eso?
Miyazawa: Sí
SWAMIJI: ¿Qué hace tu padre o tu madre?
Miyazawa: Él, tal vez esté ahora retirado.
SWAMIJI: ¿A qué te dedicas en Japón?
Miyazawa: No tengo trabajo.
SWAMIJI: ¿Cómo puede ser? ¿Es difícil conseguir trabajo?
Miyazawa: No, es muy fácil.
SWAMIJI: Entonces, ¿por qué no consigues trabajo?
Miyazawa: No, mi propósito es continuar mi estudio y meditación.
SWAMIJI: ¿Tienes la impresión de que la gente que trabaja en una oficina no puede hacer meditación? ¿Eso piensas? ¿Piensas que un hombre de meditación simplemente se sienta, se queda quieto, y por toda la vida solo va a meditar?
Miyazawa: No, no pienso eso.
SWAMIJI: Entonces, ¿por qué no haces algún trabajo?
Miyazawa: Conseguir o no trabajo, no es tan importante para mí.
SWAMIJI: Es importante. No estoy hablando de alguna cosa innecesaria. El trabajo también tiene una conexión con la vida.
Miyazawa: Sí, sí. Lo sé. En cualquier trabajo que haga, tal vez trato de meditar mientras laboro.
SWAMIJI: No; responde a mi pregunta: ¿Por qué no estás haciendo algún trabajo? Sobre la meditación ya pensaremos después. Primero dime por qué no te hace falta hacer algún trabajo. Trabajo y meditación deben ir juntos. De lo contrario, si pones énfasis en un solo lado, el otro te dará problemas.
Miyazawa: Sí. El trabajo es solo para conseguir algún dinero con qué mantenerme.
SWAMIJI: No. No es solo por dinero. Es una necesidad de la personalidad humana. Acción y pensamiento son dos aspectos de la personalidad humana. Tú no puedes solamente pensar, sin hacer nada.
Miyazawa: Sí, sí, sí.
SWAMIJI: Así que una respuesta mía, es que debes hacer algún trabajo.
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Otra pregunta: ¿cuántos años tienes?
Miyazawa: Treinta y cinco.
SWAMIJI: ¿No quieres casarte? ¿No lo deseas?
Miyazawa: No intensamente.
SWAMIJI: De cualquier manera, al menos sutilmente, allí está. El deseo por casarte está allí.
Miyazawa: No muy fuerte.
SWAMIJI: ¿No del todo? No. Se hará fuerte más adelante. ¿Por qué quieres esperar hasta que se vuelva fuerte? Es por eso por lo que está atormentando tu mente. Si vives continuamente a los pies de un gran Gurú, y haces todo lo que él diga, entonces este problema no puede surgir. Si no tienes Gurú, y tú solo estas empezando a hacer meditación, este problema no puede evitarse. El Gurú tiene algún método de liberar al buscador de problemas de esta clase, el cual es una técnica secreta conocida solo por el Gurú, y no es para demostraciones públicas o conferencias.
Pero si esto no es posible, tú tienes que seguir el curso normal de la vida. Debes estar viviendo una vida activa, y nada hay malo en vivir la vida de casado. La vida matrimonial no está contra la espiritualidad, porque es un aspecto del requerimiento de la personalidad, de la misma forma que la meditación también es un requerimiento. No es absolutamente necesario que una persona se case; también se puede vivir sin matrimonio; pero entonces, cuando surga el problema, debes saber como manejarlo. Así que ahora tú estás teniendo solo el problema, sin el método para manejarlo.
La vida espiritual no significa escapismo. Escapas de las responsabilidades de la vida, y entonces vas a Dios. Eso no es posible. La personalidad humana es una estructura aprobada por Dios, y dicha estructura tiene ciertos requerimientos. En tanto que tienes que pasar por ese modelo estructural de tu personalidad, las necesidades de la personalidad deben cuidarse también. Tú no quieres casarte, entonces más adelante tampoco necesitarás comer alimento. ¿Para qué necesitarías comer? Si una cosa no necesita ser hecha, la otra cosa tampoco necesita serlo. Así que deseas comer, pero no casarte. Esas son dos caras de la presión de la personalidad humana.
Pero como mencioné, si tienes un gran maestro bajo cuya protección vives, entonces el problema no surgirá. Pero ahora no tienes Gurú. No hay maestro a cuyos pies sentarse y recibir bendiciones. De forma independiente has comenzado a meditar.
Te he dicho dos cosas; ahora viene la tercera: si persistes en esta meditación, el problema se evaporará lentamente después de largo tiempo. ¿Me entiendes?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Sea que te cases, o que tengas un maestro, o que esperes la gracia de Dios, un día el problema se evaporará. Y no comas mucho. Debes comer solo una vez al día. Cuando el cuerpo es muy robusto, creará toda clase de deseos. Come solo una vez al día. No cenes por la noche, y tampoco tomes desayuno. Pero tampoco vayas a los extremos.
Miyazawa: Mi método de meditación es...
SWAMIJI: ¿Cómo es tu meditación? Dime cómo estás meditando.
Miyazawa: Es una meditación conceptual; solamente estoy sentado pensando que todo el universo mismo está meditando. Es algo así.
SWAMIJI: Es muy bueno. Hermoso. Este método es maravilloso. Continúa con esta meditación. Si no deseas casarte, no te cases. No te estoy obligando, pero debes trabajar y rodearte de amigos, para que también tengas una vida social. Si no tienes ninguna vida social, te aíslas de la gente, y si no haces ningún trabajo y dices: "voy a meditar", entonces la meditación no será muy exitosa. No tienes amigos con quienes hablar. La conversación también es una cosa necesaria. Es un alimento; algunas veces es alimento para la mente. Si el matrimonio es una esclavitud, no necesitas casarte. Pero si es inevitable, entonces debes hacerlo. O esperas que venga la gracias de Dios. Si eres sincero en tu meditación, ella se cuidará a sí misma. ¿Cuánto tiempo meditas al día?
Miyazawa: Una hora en la mañana todos los días.
SWAMIJI: ¿Y qué haces las otras veintitrés horas? El día tiene veinticuatro horas. Una hora estás meditando, ¿qué haces por veintitrés horas?
Miyazawa: ¿Ahora?
SWAMIJI: Sí.
Miyazawa: Una hora meditando, luego algunas asanas y pranayama, después vengo aquí y asisto al darsham, luego regreso...
SWAMIJI: En Japón, cuando vayas, ¿harás meditación por una hora?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Y por veintitrés horas ¿qué harás en Japón?
Miyazawa: En la mañana, lo mismo; meditación, un poco de asanas y pranayana, y entonces algún trabajo temporal.
SWAMIJI: ¿Estás haciendo algún trabajo en Japón?
Miyazawa: Sí, pero temporal.
SWAMIJI: Pero aún si es temporal, ¿es un trabajo diario?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: ¿Cuántas horas trabajas?
Miyazawa: Cerca de siete horas.
SWAMIJI: Está bien. Aún cinco horas está bien. Trabajas cinco horas. ¿Has hecho amigos?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Sé amistoso con las personas. Den un paseo. Sé abierto y libre en tu conducta. No seas restringido. Muchos buscadores espirituales piensan que la búsqueda espiritual significa no hablar. Que simplemente te sentarás a preocuparte. Esto no es apropiado. De ninguna manera debes ejercer presión sobre tu personalidad. De cualquier manera, mi palabra final para ti es que sigas con esta meditación; sé un hombre normal, interiormente feliz, muy sociable, amistoso con las personas; haz algún trabajo, entonces, al final, a su debido tiempo todo estará bien.
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Esta es mi respuesta para ti. Para finalizar, ¿cuál es tu meta?
Miyazawa: Inmersión en el Absoluto.
SWAMIJI: Eres un gran hombre. Me complace escuchar eso. Si de verdad lo deseas, lo conseguirás. ¿Hay alguien más sentado aquí que desea unirse al Absoluto?
Otros Visitantes: ¡Sí! (Risas)
SWAMIJI: ¿Quién es esta dama? ¿Janaki? ¿Sabes Inglés?
Janaki: Sí, Swamiji. Puedo entender, pero no puedo hablar.
SWAMIJI: ¿Deseas unirte al Absoluto?
Janaki: Sí, sin duda alguna. Bendígame, Swamiji.
SWAMIJI: Sí. Algún día lo alcanzarás.
Janaki: Gracias, Swamiji.
SWAMIJI: Escucha. Dices que sientes lujuria y todo eso. Realmente lujuria significa falta de una contraparte, falta de una mujer. ¿Sabes que el Absoluto también incluye las mujeres? ¿Sabes eso?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Cientos de millones de mujeres están en el Absoluto (el grupo ríe). ¿Qué es lo malo? ¡Te estás atormentando innecesariamente! Dentro del Absoluto hay millones de mujeres, así que, ¿por qué te atormentas sin necesidad? Pienso que no debe haber problema.
Miyazawa: Sí. El problema, tal vez, se confina a una sola dama, o... (el grupo ríe)
SWAMIJI: No. ¿Por qué una sola dama? El Absoluto te dará millones de damas. Por qué deseas una? (el grupo ríe). Este también es otro problema. Cuando alguien te va a dar mucho, tú no lo quieres. Solo quieres un poquito.
Miyazawa: No, No (ríe)
SWAMIJI: Eres un chico muy divertido. Alguien dice: "Soy un hombre pobre; necesito dinero". "Te doy cien millones de dólares. Tómalos". Tú dices: "No, no; no me hacen falta. Solo quiero diez dólares". Si piensas así, ¿qué puedo hacer? Solo quieres diez dólares. Eso es lo que estás pidiendo. Pero el Absoluto dice que te dará cien millones de dólares o más. Tu dices, "no los deseo; solo quiero diez". ¿Está bien?
Miyazawa: No.
SWAMIJI: Tu problema es una creación innecesaria. Millones de mujeres vendrán a ti. ¿Las quieres? (el grupo ríe). No. No estoy bromeando. Es algo muy serio. El mundo entero se convertirá en lo que tú deseas, si así lo quieres. Estarás pensando que es una cosa extraña. No es tan extraña. Toda la tierra, los cielos, todo se volverá líquido y se verterá como néctar sobre tu cuerpo; nada se resistirá ante a ti. Todo lo que desees se manifestará inmediatamente desde dentro de tu conciencia. Tienes algunas ideas disparatadas sobre las mujeres y esas cosas, que para decir la verdad, no tienen significado. No hay hombre, no hay mujer; nada hay en el Absoluto. Quieres Suprema Perfección teniendo la compañía de alguien externo. Esto es un defecto psicológico en la mente. Que algo externo haga falta, se debe a un defecto en el proceso del pensamiento. En tanto que en el Absoluto, todo esta de una vez, el cielo y la tierra se derretirán ante ti. Hombres y mujeres, todo estará allí, lo que sea que quieras. ¿Quieres esto o no? ¿Qué dices?
Miyazawa: Sí.
SWAMIJI: Entonces medita más, y no digas que eres infeliz por querer casarte y todo eso. Son chifladuras estúpidas. Debes sacar esas ideas de la mente. Cuando vas a tomar todo el universo de perfección, ¿por qué quieres solo una cosa pequeñita? ¿Está bien?
Miyazawa: Sí
SWAMIJI: Que no tengas ningún problema en el futuro. "Se ha ido": Di, "se ha ido".
Miyazawa: Se ha ido.
SWAMIJI: Sé feliz.

De "YOUR QUESTIONS ANSWERED"

domingo, 20 de diciembre de 2009

DIFICULTAD DEL CONTROL DE LOS SENTIDOS Y NECESIDAD DE LA GRACIA DE DIOS

Debe emplearse un poco de entendimiento en el control de los sentidos. Es necesaria una disciplina filosófica para adiestrarnos hacia a ese entendimiento. No debemos caer en la impresión de que es fácil controlar los sentidos. Nadie lo ha hecho, y no es fácil hacerlo. Los sentidos son terribles. No los podemos controlar por fuerza de voluntad. Pero pueden ser subyugados en alguna extensión en el mismo sentido en que una enfermedad crónica puede, hasta cierto punto, controlarse. La enfermedad no puede erradicarse totalmente, pero se puede frenar su vehemencia. Igualmente los sentidos pueden subyugarse en algo, aunque solo pueden conquistarse totalmente en meditación profunda, en Samyama, en Samadhi y finalmente, en Kaivalya Moksha. No antes.

De acuerdo con la técnica de Pratyahara mencionada en los Yoga Sutras, el retiro de los sentidos se intenta de muchas maneras. La primera y más ordinaria forma es el aislamiento físico de uno mismo con respecto a las cosas tentadoras. Entonces, habiéndose ubicado en una atmósfera apropiada, se debe meditar sobre las circunstancias de control perfecto del deseo por los objetos de los sentidos, y no solo sobre la percepción de ellos. Debe acabarse el gusto por los objetos de los sentidos. Vairagya o abandono, renuncia, es la ausencia de deseo. Vairagya o Viraga significa ausencia de Raga. Eso significa liberación de los deseos. Liberación interna de los deseos se llama Vairagya o renunciación. Vairagya no es solo una disociación física de los objetos. ¿Pero como podemos estar libres de deseo por algo, cuando sabemos que puede satisfacernos de alguna manera? Estamos confundidos, y por eso tenemos la impresión de que los objetos pueden satisfacernos. Entonces, una vez más, se hace necesaria una educación intelectual; se demanda una investigación racional. No podemos subyugar nuestros deseos a menos que estemos seguros de que están completamente satisfechos, sea porque se extinguieron gracias a que fueron cumplidas sus demandas, o por su sublimación mediante un profundo entendimiento. Aquí la Gracia de Dios es de vital importancia. Solo Dios puede ayudarnos, nadie más. Daivi hyesha gunamayi mama maya duratyaya, mameva ye prapadyante mayametam taranti te. Es la fuerza de Dios o Sakti la que se manifiesta como deseo. ¿Quién puede contra ella? Toda nuestra fuerza no puede nada ante el Sakti de Dios. Hércules no puede. La única forma para el buscador espiritual es rendirse a Él y clamar, "Oh, ¡Señor! Ayúdame, estoy desamparado", y Él se hará cargo del buscador.

De "YOGA AS A UNIVERSAL SCIENCE"

domingo, 13 de diciembre de 2009

FILOSOFIA DE LOS DESEOS Y SATISFACCIÓN DE LOS DESEOS

Hasta cierto punto se requiere conocer la estructura de la mente. Una educación filosófica es necesaria antes de la educación psicológica; la práctica del Yoga viene después. Por esto, antes de que la práctica del Yoga comience, hay necesidad de conocimiento psicológico basado en una disciplina filosófica. No debe empezarse la práctica de repente. Los deseos surgen en la mente debido a la naturaleza de nuestra existencia en el mundo, por causa de la circunstancia de la vida y la relación que mantenemos con las cosas exteriores. Todos nuestros deseos son los anhelos por nuestro espíritu perdido. Realmente nos buscamos a nosotros mismos. No estamos buscando cosas.

Puede inquirirse: "¿Qué significa 'nos buscamos a nosotros mismos'?, pues es muy claro que buscamos algo más". Este llamado 'algo más' que buscamos, solo es un instrumento que empleamos para despertar una clase de humor en nuestra mente, que reflejará una forma de satisfacción en nosotros mismos. Es, más bien, una idea difícil de captar. Visualizamos el mundo como una herramienta para nuestra satisfacción; el mundo mismo no es la fuente de nuestra satisfacción. No podemos despertar un humor de felicidad dentro de nosotros mismos, sin la instrumentalidad de los objetos externos. El Ser Universal es la última fuente de felicidad para todos. Toda felicidad está en ese Ser que todo lo penetra. El Omnipresente Absoluto es la fuente de la felicidad, la encarnación de la Gloria, aquello que buscamos y que nos arrastra en dirección de los llamados objetos de los sentidos. Cuando buscamos los objetos de los sentidos, finalmente buscamos a Dios; algo que no seremos capaces de apreciar en el presente, dadas las circunstancias psicológicas en que nos hallamos. Dios está hablando a través de todo objeto en todas partes. Tal vez por esta razón, en alguna parte el Kathopanishad nos dice en un verso que los caminos a través de los cuales el carro de este cuerpo debe conducirse hacia la meta, son los objetos de los sentidos. Dicen esto sin mucho comentario los Upanishadas. Los objetos del mundo son los caminos a través de los cuales debemos conducir nuestro organismo para el logro de Vishnu-Loka: Tad-vishnoh paramam padam (Morada del Señor). El mundo no es ni amigo ni enemigo; el mundo es lo que es. Debemos entender esto y no especular. La gran fuente de alegría es el Ser Universal, pero el Ser Universal ha venido a ser un ser individualizado. El infinito Purusha se ha convertido en el finito Jiva. Así cuando uno busca la satisfacción de un deseo o anhelo particular, uno está buscando la infinitud de uno mismo que es la Purusha. El Jiva, la indiviudalidad localizada, busca expresión a través de los objetos de los sentidos para el establecimiento de sí mismo en la Purushidad de sí mismo. Es la infinitud de Purusha lo que todo el mundo busca, no los objetos del mundo. Pero a causa de que la infinitud es imperceptible y solo el mundo es perceptible, las personas corren hacia aquello que es visible a los sentidos y en el proceso, el invisible y celeste impulso por el infinito es completamente ignorado, y las personas no saben si tal impulso está ahí.

De "YOGA AS A UNIVERSAL SCIENCE"

domingo, 6 de diciembre de 2009

NUESTRA IDEA DE LOS OBJETOS CAMBIA

Transformarse es un proceso activo de cambio de las condiciones o eventos, en dirección a la meta que aún está por alcanzarse exteriormente en el tiempo y el espacio. Todo cambia en alguna otra cosa, se transforma de una condición a otra. Y esta tendencia de las cosas a transformarse en un estado diferente, es indicativa de la inquietud que caracteriza la condicón en que se encuentra. Existe inquietud porque es insatisfactorio permanecer por un largo período en esta condición.

Es insatisfactoria porque no significa lo que uno requiere. Lo requerido está por fuera de la persona y así, hay un movimiento espacial, una actividad temporal por fuera de uno mismo, en dirección de alguna meta concebible. De tal forma que transformarse es un movimiento objetivo de la conciencia. La meditación no es un movimiento hacia un objeto por fuera de sí, aunque en ciertos tipos de meditación, puede parecer que se está meditando en algún objeto. Aún aquí, el movimiento es solo una apariencia y realmente no una actividad en el sentido de un desvío hacia los objetos. De nuevo volveremos sobre este punto un poco más adelante.

Ser es diferente de transformarse. La diferencia es ostensible. Mientras que transformarse es una tendencia a la metamorfosis en dirección de algo fuera de sí mismo, ser es una tendencia hacia sí mismo, es un auto-retiro al centro de uno mismo, y no un aislamiento de uno mismo en algo diferente de lo que uno es. "¿Qué es un objeto y qué un sujeto?", es una pregunta que de nuevo está ante nosotros. ¿Qué significamos con un objeto? Algo que no podemos considerar idéntico a nosotros; cualquier cosa que está, desde nuestro punto de vista, completamente desconectada con aquello que consideramos que somos; eso es un objeto, un "esto no soy yo"

Y cualquier cosa con la que estemos vitalmente conectados de una manera inseparable, en cuyo contexto afirmemos una auto-identidad, eso es un sujeto. Cuando hablamos de sujetos y objetos nos referimos naturalmente a la conciencia, la cual juega papel importante en toda experiencia. Es la conciencia de una circunstancia particular la que trae distinción entre subjetividad y objetividad. La conciencia de una cosa se disocia de la cosa y asume la presencia de alguna distancia espacial o, al menos, una diferencia espacial lógicamente concebida entre ella misma y el objeto. Pero cuando tal distinción espacial no puede ser concebida entre el objeto y la conciencia, entonces no hay objeto, solo sujeto. Solo la conciencia puede ser el sujeto, todo lo demás es objeto.

Todo lo que es separable de la conciencia es un objeto de conciencia. Ahora, esa separabilidad puede ser solamente una noción; puede no ser fáctica. Tanto si es un concepto imaginario de diferencia o una distinción fáctica, en tanto la mente o la conciencia no pueda aceptar su unidad con esa cosa o concepto particular, estos serán objeto. En meditación la conciencia es capacitada, no por el ejercicio de una fuerza externa, sino por una educación introducida en ella desde el interior, para florecer a una comprensión más amplia de los hechos, en donde la noción de los objetos ha cambiado; se ha transformado.

No es que las cosas cambien en la meditación, sino que nuestra idea de los objetos cambia. Para dar un ejemplo común, tenemos el fenómeno de la diferencia que hacemos entre los objetos soñados y la experiencia en vigilia. Los objetos en el sueño están totalmente desconectados del sujeto que percibe. Somos los soñadores y no sabemos que lo somos, mientras que realmente estamos soñando. La cuestión de los sueños no surge cuando realmente estamos en esa condición. Es una experiencia tan buena como cualquier otra. Las cosas que vemos en sueños están desconectadas de nosotros y, por tanto, también tenemos placeres y dolores.

Hay toda clase de cosas en el sueño tal como en la vigilia. Hay colinas y valles, personas y cosas, experiencias placenteras y miserables. Todos esos objetos del mundo de los sueños que causan placer o dolor, están desconectados de ese grado particular de conciencia que los experimenta, y esa es la razón por la que hay placer o dolor. Estos son causados por reacciones surgidas entre la conciencia subjetiva y su relación con el objeto de que se trate. ¿Qué sucede cuando despertamos del sueño? Los objetos que vimos, que fueron causa de nuestros placeres y dolores, se han desvanecido. Puesto que se desvanecieron, las penas y placeres conectados con los objetos también se fueron. ¿A dónde fueron los objetos? ¿En dónde se desvanecieron?

De "AN INTRODUCTION TO THE PHILOSOPHY OF YOGA"